Otro Rey Mago

 

Ahora le toca a Gaspar: se supone que Melchor es rubio (y no, no tengo figura de él, mala suerte). Ésta vez es un imán, y no me acuerdo de cómo lo conseguí, aunque tengo la impresión de que salió en un Roscón de Reyes. Habitualmente lo tengo pegado en la luz de cabecera de mi cama; que está a un lado de la cama, en realidad, porque originalmente era una habitación con dos camas. Pero no cambié la luz de sitio cuando me instalé, y ahora me da pereza. En fin, hace que leer de noche sea entretenido.

Esta vez no usé la libretilla de cuero porque acababa de dibujar en ella, y la dejé abierta, para que secase la tinta. En vez de eso, usé un recorte que me quedaba de papel de acuarela de grano fino, de un tamaño ligeramente mayor. La tinta fue aplicada con plumilla.

Un detalle tonto: cuando combinas técnicas (aquí es acuarela y tinta china) hay que tener en cuenta que, sea cual sea la primera técnica que uses, déjala secar antes de aplicar la segunda. No lo tuve en cuenta en el primer dibujo que hice y monté un borrón de cuidado. Porque éste es el segundo que realicé, con el resto del recorte de papel. Por suerte, era un tema sencillo, así que no llevó mucho tiempo. Quedó simpático, ¿no?

Os habréis fijado que la pata trasera del ¿camello? tiene algo: es un pegote de pegamento. Para poder dibujar el imán, lo apoyé sobre una goma de borrar. Pero hay días que tengo los dedos de mantequilla, y se me resbaló antes de colocarlo. Gracias a eso, supe que estaba hecho de resina. 

Y si queréis ver un paseo por el bosque, fijáos aquí:

https://fotolog.miarroba.com/gkane/deborah-kerr-en-eye-of-the-devil-293/

Venga, a otra cosa. Cuidáos y hasta la próxima, un saludo.